Si cierto, estoy cansado, mucho.
Estoy cansado de proyectos agotados, de quien no es capaz de ver como ha pasado su tiempo y lo agota junto al mío construyendo una ciudad que es suya no de todos.
Estoy cansado de falsos marxistas que gestionan su propuesta en un estúpido paseo en bañador. Que han olvidado qué y a quien se deben, que confunden la dialéctica con neopositivismos y posan con cuidada barba en círculos de poder.
Estoy cansado de quien cuando pudo aumentó sus asesores y ahora afirma su reducción si es capaz de alcanzar el poder.
Estoy cansado de escuchar que la política es gestionar, pero ellos, no quién tenga la capacidad. De que piensen la política sin contendido políticos.
Estoy cansado de multipropiedades intelectuales en las que nunca se sabe que opción puede resaltar, porque lo que les interesa ni siquiera es la de su partido sino la personal.
Pero definitivamente estoy cansado de mi mismo, de mis dudas, de mis incapacidades, de la maldita manía de pensar que me hace reflexionar.
Qué nos den, lo van a hacer de todas formas.
No me castiguéis demasiado quienes me leáis, tampoco importa tanto.
1 comentario:
Hartazgo, hastío y poca luz al final del túnel político. Muy poca luz.
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