Mi trabajo
en la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía y mi cercanía con los
técnicos en Arqueología pertenecientes a la misma, acentuó mi interés como
historiador por los procesos evolutivos y sustitutivos que mostraban los
yacimientos.
Al mismo tiempo, era consciente de que los diferentes estratos nos
mostraban una imagen fija, sincrónica, la mayoría de las veces sin una relación
directa con la posterior, procesos de sustitución que no permitían analizar el
cambio. Pese a todo, se mostraban rasgos que permitían observar una línea
continua de semejanzas, de cercanías, era la misma gente, pero había cambiado.
Un cierto alejamiento del análisis funcional y del estructuralismo que permiten
un conocimiento amplio, pero sincrónico, de las sociedades que analizan,
acompañó mi evolución teórica.
Mi interés por ese cambio cultural, está en el
inicio de este trabajo de investigación. Posteriormente el acercamiento a los
movimientos sociales a causa de mi trabajo, desarrollando la Coordinación en la
Provincia de Málaga de la Agencia Andaluza del Voluntariado y de la Dirección
General de Políticas Migratorias de la Consejería de Gobernación de la Junta de
Andalucía, me llevó a la constatación de la diversidad sin determinismos,
fundamentada en la infinita capacidad creativa de los seres humanos en los que
sigo confiando. Mi relación personal con representantes de las diversas
culturas que, a lo largo de estos últimos años, se han instalando en nuestra
provincia, junto al desarrollo de trabajos relativos al I y II “Plan Integral
Para la Inmigración en Andalucía” fue consolidando en mayor medida mi interés
por las relaciones entre culturas y los procesos de cambio cultural que
conllevan. Al mismo tiempo, participé como relator en la mesa de
“Interculturalidad” del “Plan Estratégico de la Cultura en Andalucía”, conocido
como PECA, y fue ahí, en el contexto de esos debates, donde comencé a
plantearme la interculturalidad como una
metodología de actuación que permitiera establecer la comunicación entre los
diferentes grupos que conforman nuestra sociedad actual. Creo que es
significativo resaltar que puede actuar no solamente entre grupos culturales,
sino entre las propias subculturas que se generan en los grupos más amplios.